Siempre sentí la necesidad de desarrollarme al menos en dos áreas: la psicoterapia y el arte. No siempre podía vincular todos mis intereses, mis recorridos, y las identidades que se iban despertando en cada experiencia. Sin embargo hoy creo firmemente que nada de lo ocurrido fue casual ni superfluo. Lo espiritual es es el trasfondo, una manera de llamar a Eso inefable que trenza, entreteje, sostiene y da sentido a las cosas. Bendigo cada búsqueda y lo que puedo aprender de vivir... trenzando mundos. Este es un intento de transmitir algo de ese aprendizaje, aún sabiendo que cada experiencia tiene mucho de intransferible.



SILVIA JUDIT LERNER
Contacto: silviajlerner@gmail.com

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COMUNICACIÓN Y ARMONÍA

        La comunicación es la base de toda relación. Y nuestras relaciones suelen ser la base de nuestra vida.
    Hay que saber comunicarse. Y la comunicación efectiva consiste entre otras cosas en una artística combinación entre ser cuidadoso y ser audaz. En el decir. En el callar.
     Pero no siempre nos comunicamos efectivamente. Abrir la boca es como una forma de abrir el corazón. El propio. El del otro.
   
     A veces tenemos demasiado miedo de intentar un cambio, por lo que nos vamos apegando a un cierto modo de actuar. Aunque no nos resulte verdaderamente positivo ni gratificante. También puede ser que terminemos desarrollando un modo de comunicarnos con los demás, un estilo, no porque verdaderamente nos sintamos a gusto, sino porque suponemos que es lo que se espera de nosotros, o de todos: "el modo correcto de hacer las cosas”… que resulta que no le divierte a nadie, ni a nosotros mismos.

    Vamos acomodándonos más a lo que creemos seguro, que a soltar las distintas posibilidades de ser que hay en nuestro interior.
    Nos vamos comprando nuestras propias historias acerca de cómo somos, quiénes somos, quiénes son los otros, qué esperan, qué se hace de mañana, qué se hace de noche… qué se hace… qué hacen los demás… los otros… los otros…
    Muchos otros no necesariamente hacen un nosotros.
    En definitiva, a veces la armonía verdadera pasa por poner en riesgo la armonía.

“LA GENTE SE ENFERMA POR ESAS COSAS” (Cambiamos de tema...)

    Ana dice: “Me parece que el matrimonio es el arte de arreglárselas sola para sentirse acompañada”...
    Cuando algo la lastima, oscila entre el resentimiento y el mandato de ser feliz, entre el dolor que puede registrar a lo largo y ancho de todo su cuerpo—, y la idea de luchar contra ese mismo dolor, de no darle lugar, de asfixiarlo quitándole espacio.
   Hasta que otra idea también hablando en su cabeza le sugiere que el dolor es algo que primero debe aceptarse para luego dejarlo ir. Si es que se va.
    Está cansada de decirse aquello que pudiera hacerla más parecida a su marido para adaptarse a él y a lo que no la hace feliz.
    Se duerme triste, y sueña con la ingratitud de su hermana, con sus pedidos y su falta de reconocimiento. Después de todo, una ingratitud revela las otras, las que probablemente han signado muchos de sus vínculos. Y con tantas cosas leídas, con tanta psicoterapia, no puede evitar el viejo tic de preguntarse por su responsabilidad en ello.

Esto nos producen nuestros largos esfuerzos de automejoramiento: de un modo
sofisticado encontramos la manera de ser siempre culpables de todo lo que nos duele. ¿Será bueno?... ¿No es bueno a veces aceptar que el otro es capaz de lastimarnos?... se pregunta esta vez—. ¿Será bueno "ser buena"?...

    El mito de la Esposa Perfecta no cae de un día a otro, ni de un año al otro, ni de un desencanto a otro desencanto.
    Es fácil refugiarse en la ternura de los niños cuando esto sucede. Y es difícil no repetir con ellos el modelo.
    Una madre es también, muchas veces, la prótesis de lo que le falta al padre en el trato con los hijos. Ana quisiera que sus hijos pudieran crecer con amor y reconocimiento por parte de ambos: de padre y de madre. No quiere ser siempre la complacencia que suaviza y excede a veces la severidad de su marido... Pero no ve otra opción. Es más: a veces le parece que si ella misma fuese fría y rigurosa, su marido se sentiría obligado a la ternura, a la paciencia. De hecho ocurre alguna que otra vez, porque él es tan bien intencionado como ella. Pero, de hacer ese cambio a propósito, una vez más se vería obligada a torcer su naturaleza.
La gente se enferma por estas cosas decía la mujer de “Irreconciliables diferencias”—:  por no hacer lo que quiere, lo que siente.    Pero cuando se quieren cosas desde los distintos corazones que fueron inyectados en el propio corazón, ya no es fácil saber qué se quiere.
    Y no saber qué se quiere, también enferma.


ENEMIGOS DE LA PRODUCCIÓN CREATIVA III


Hay ciertos excesos que también inhiben y bloquean.

Por ejemplo:
* Tener una necesidad excesiva y constante de agradar : bloquea mucho la autoexpresión espontánea
* Un exceso de respeto por "los que saben" o por el modo tradicional u ortodoxo de hacer las cosas:   no nos permite inventar, arriesgarnos a lo nuevo y a lo propio
* Sobrevaloración de lo que uno hace : no permite soltar la obra
* Desvalorización de lo que uno hace: porque se valora excesivamente lo que hacen los otros
* Hacer juicios todo el tiempo
* Preguntarse demasiado "para qué"... Generalmente la obra tiene un sentido en sí misma; luego puede tener también un destino.

Y por último:
* No poder transgredir, que nos lleva muchas veces a repetir.
* No poder estar solo/a : si bien podemos estar en un grupo de creación -como es el caso del taller de arte-a veces mermamos nuestra posibilidad de producir, porque la obra requiere momentos de aislamiento creativo, de conexión con uno mismo.
* La pereza: Creer que creamos solamente cuando sale espontánea y fácilmente.

ENEMIGOS DE LA LA PRODUCCIÓN CREATIVA II

   Muchos obstáculos a la producción creativa provienen de nuestros temores.
Crear da placer y permite el encuentro con uno mismo. Pero también da miedo. Y los miedos que aparecen cuando abrimos la puerta para ir a crear pueden ser múltiples.

Algunos son más conocidos y obvios:
* El miedo a mostrar - se
* El miedo a equivocarse
* El miedo a fracasar
* El miedo a la indiferencia

... Pero también hay otros, que pueden paralizar tanto más que aquellos:
* El miedo a competir
* El miedo a tener éxito
* El miedo a la envidia propia y ajena
* El miedo a  pasar desapercibido/a
* El miedo a no poder pasar desapercibido/a
* El miedo a repetirse
* El miedo a lo nuevo
* El miedo a lo desconocido

Y hay más... ¡pero ya son muchos para procesar en una sola entrada! ¿Te reconocés en alguno? ¿Cómo lo enfrentás?..

ENEMIGOS DE LA LA PRODUCCIÓN CREATIVA I

    A lo largo del trabajo terapéutico y de mi propia búsqueda artística, voy identificando lo que podría llamar (un poco "dramáticamente") enemigos de la creatividad, o de la producción creativa. Creo que es esencial trabajar sobre ellos, porque entiendo la creatividad como una función esencial para el bienestar y la salud. Dicho de otro modo: la vida sana es energía que fluye, cambia, y produce... no importa en qué área. No es necesario que se manifieste en lo que conocemos comúnmente como obra de arte. Uno puede ser creativo - o no - en el amor, en la cotidianeidad, en la comunicación con otros, en la manera de vestirse, de trabajar, de recibir a los amigos, de cocinar, de criar a los hijos, de vender, de viajar...
    Todo bloqueo en la creatividad - sea en el área que sea - es un bloqueo en nuestra vitalidad. 
    Ahí donde la rutina ocupa el lugar de lo creativo, nuestra luz se apaga un poco. Tarde o temprano, nuestra salud -física o anímica - paga un precio.

Algunos de los enemigos que identifico son:

* LA DISPERSIÓN: distintas causas pueden hacer que uno empiece algo y lo deje. Una y otra vez. O que empiece muchas cosas al mismo tiempo, por tener múltiples intereses. A veces no logramos priorizar adecuadamente nuestras tareas, de manera que el tiempo jamás alcanza... La tendencia al multitasking  requiere que desarrollemos internamente un centro organizador que le de sentido y orden a nuestras distintas tendencias y necesidades.
   Para quienes tienen múltiples intereses, me permito sugerirles FOCALIZACIÓN y un ordenamiento lo más prolijo posible de sus objetivos y sus tiempos. Para ello, suele ser de ayuda tener listas de las cosas a realizar, separadas por áreas, tiempo límite si lo tienen, y cualquier otro dato importante.

* EXCESO DE AUTOEXIGENCIA Y PERFECCIONISMO: Lo mejor es enemigo de lo bueno. Cuidar el producto al punto de no permitir que la acción fluya, no darse el permiso de experimentar, de hacer y tirar, de equivocarse, detienen nuestro flujo creativo. No se debería juzgar constantemente mientras se hace algo. Una parte del hacer necesita la levedad del juego.

(Continuará... Y te invito a que agregues los que vos identifiques)

INSPIRACIÓN Y TRANSPIRACIÓN

   Escribir, pintar, componer... a veces parece que nunca es el momento. ¡Especialmente cuando hay varios mundos que trenzar!... ¡Qué difícil puede resultar hacerse el espacio de soledad, silencio y respeto por uno mismo, indispensable para crear algo consistente!... Para empezar y terminar...
   Porque la idea luminosa (y numinosa) surge sin dificultad, irrumpe en medio de cualquier cosa, como los yuyitos verdes que brotan en las juntas y grietas de las baldosas. Ellas no se anuncian, no piden permiso, no se disculpan.
   Pero la obra, lo que se dice la obra completa y terminada, es un raro cultivo que -en general- requiere tiempo, dedicación y paciencia. El famoso 90% de transpiración. Como tantas cosas en la vida.
   Como el amor, por ejemplo. Que se inicia con ese rutilante 10 % inspirado, y parece que sólo se sostiene con un 90 % transpirado...
   A veces olvidamos que el amor sólo se construye y sostiene alimentado de atención, de tiempo dedicado. 

UNO SE HACE A TRAVÉS DE LO QUE HACE

Nuestra creatividad es la expresión de nuestro sol interior, el foco de luz del Sí Mismo que todos poseemos, que vamos desplegando - o no - a lo largo de nuestra vida. Hacer se vuelve ser.

INVITACIÓN

     Quiero que este sea un espacio en el cual te sientas con libertad para compartir tu propia experiencia en el camino creativo, especialmente si - como yo - tu deseo de expresarte habla a dos voces. O a tres. O directamente es un coro... 
     Pienso que es posible que haya mucha gente que se siente llamada (ese es el verdadero origen o sentido de la palabra "vocación") a manifestarse en el mundo por más de un canal. Y por las demandas de la vida silencia alguna, o desarrolla poco algún camino que ama, o directamente sacrifica una parte de sí para olvidar el dolor de no verse crecer... Vivimos una vida tan exigente, con tiempos que tenemos que "maximizar" (como si al tiempo pudiera hacérsele "algo"), con tanto exitismo y dificultades para resolver cada día...
     ¿Qué parte de nosotros estamos dejando afuera? 
    A veces sacrificamos eso que llaman "el niño interior", el que juega... o la parte de los sueños adolescentes en los cuales nos podíamos imaginar en nuestro pleno resplandor... A veces dejamos de lado una parte adulta potente y capaz y creativa para darle lugar a otra parte adulta hiper responsable, cumplidora, aceptada, seria... Qué perdemos?
     
    "Trenzando mundoS" amaneció hoy deseando ser un espacio para trenzar mundos. Te invito.

EL CAMINO RECTO PUEDE TENER MUCHAS VUELTAS

A lo largo de toda mi vida mis caminos siempre se han abierto en un abanico de múltiples posibilidades. Una y otra vez me encontré con bifurcaciones que me pedían que eligiera y descartara. Sin embargo, las bifurcaciones también pueden ser un juego de la mente. Parece haber una unidad interna que le da sentido a toda aparente diversidad. Así, no siempre hizo falta abandonar algo para tener otra cosa.
Como trasfondo, siempre estaba la necesidad de mi alma de expresarse y de encontrarse con otros. Mi padre me enseñó que de esta vida solamente podemos llevarnos vínculos y conocimiento. Quizás porque lo aprendí muy joven, o simplemente porque ya estaba en mi naturaleza, esta idea caló profundamente en mí.

El mundo ha sido siempre un espacio infinito de desafío y crecimiento. Con amor, con temor, con pasión, con inseguridad, con certezas que tuve que abandonar... dispongo de la energía que el Universo me ha dado para hacer esta experiencia que se llama vida.